Reencuentro

July 17, 2020
Cuentos Cortos

Abrí el cajón de su velador. Todo estaba en orden. Tomé la libreta de tapa azul, al hacerlo calló la foto. La vi. Ahí estaba sonriendo, su piel dorada hablaba. Limpié dos lágrimas derramadas. Había perdido una batalla, la guerra aún no me la ganaban.

Ajusté mi cinturón y cambié mis zapatos; treinta años no se regalan, menos a una carita lavada.

Me costó encontrar su mirada; las palabras salpicadas fueron dando paso a una profunda charla. Los años pasan, pero el alma no cambia.

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